Cada vez es más habitual que las altas temperaturas nos sorprendan antes de la llegada real del verano y son muchas las comunidades que desde finales de Mayo empiezan a notar como van subiendo los termómetros. Esta subida de la temperatura es uno de los principales motivos del aumento del consumo de energía eléctrica en los hogares.
Sin embargo, no es necesario sacrificar el confort del hogar por miedo a un supuesto aumento del gasto energético. Es posible reducir la factura de la luz en verano gracias con una serie de estrategias que explicamos a continuación:
Utilizar ventiladores eficientes
Una buena alternativa al aire acondicionado son los ventiladores de techo o de pie. Estos aparatos consumen mucha menos energía y ayudan a mantener una circulación de aire constante, con una sensación de frescor. Además, gracias al uso del ventilador el termostato del aire acondicionado puede llegar a subirse hasta 4ºC, lo cual permite ahorrar en su factura, notablemente más cara y con más impacto ambiental que la del ventilador.
Sin embargo, el uso de ventiladores pueden recortar el consumo energético hasta un 70-75%, costando unos pocos céntimos la noche, lo que sumaría menos de 2 euros al mes.
Optimiza el uso del aire acondicionado
Para asegurarse un uso correcto del aire acondicionado, es necesario comprobar que la unidad se encuentra en buen estado y que sus dimensiones son las adecuadas para el espacio en el que se encuentra. Es posible ahorrar entre un 15% y un 25% en tu factura al programar el termostato a una temperatura razonable y evitar bajarla en exceso, cada grado más bajo aumenta el consumo de energía.
Además, es imprescindible mantener limpio el filtro del aire acondicionado. Un filtro sucio hará que el aparato funcione menos eficientemente y consuma más energía. Cuanto más eficientemente trabaje el electrodoméstico mas ahorro supondrá en la factura, pudiendo llegar a reducirla hasta en un 25%.
Instalar cortinas y persianas inteligentes
Utilizar adecuadamente los elementos de protección solar (persianas, cortinas y estores permite la reducción de entre el 30% y el 50% del consumo eléctrico en climatización, según el estudio realizado por el Centro de Fomento de la Investigación Sostenible de la Universidad de Minnesota. Si además complementamos el hogar con cortinas o persianas reflectantes en las ventanas expuestas al sol, la entrada de calor en casa quedará bloqueada manteniendo el hogar aún más fresco sin necesidad de utilizar aire acondicionado.
Instalar una iluminación eficiente
Además de aprovechar al máximo la luz natural y evitar tener las luces encendidas cuando no sea necesario, otra manera de fomentar el ahorro energético es sustituyendo las bombillas tradicionales por luces LED que consumen un 80% menos y apenas generan calor.
Aprovecha la energía solar
En verano, el sol es una fuente gratuita de energía. Mediante la instalación de paneles solares para generar electricidad es posible reducir significativamente el consumo de la red eléctrica.
Desconectar los dispositivos en standby
Muchos electrodomésticos y aparatos electrónicos continúan consumiendo energía aunque estén en modo standby. Según la OCU este “consumo vampiro” supone un 10% de la factura y el ahorro que se obtiene simplemente desconectándolos por completo puede alcanzar los 60 euros al año.
Además, también son estrategias que ayudan a reducir la huella de carbono, contribuyendo al cuidado del medio ambiente.